Cómo convertir tus platos en verdaderos bocados gourmet
Yolanda Bóveda Díaz es una mujer natural de las Rías Baixas, con una personalidad tan marcada como encantadora. Te va a visitar montada en un escarabajo rojo, serigrafiado con lunares negros, y se mueve con gracia hasta tu puerta para invitarte a que pruebes una de sus mermeladas. Siempre de la mano de su David, siempre bien conjuntada, siempre a la altura de las circunstancias. Tiene un proyecto que desprende feminidad, calidad y coquetería, pura y dura. Un proyecto que amarán las mujeres por cómo las representa, y al que los hombres no se podrán resistir.
Ella es la responsable de La Mariquita de Azúcar. Una línea de mermeladas de original elaboración y singular sabor, que tienen un valor incalculable a nivel culinario, y que lejos de ser un producto nocivo para la salud, te alegra el alma y solo tiene un porcentaje mínimo de azúcar. Porque son artesanales, naturales, y hechas con las frutas de temporada.
Sin colorantes, sin conservantes, sin edulcorantes
Pero a parte de todas esas virtudes… Están buenísimas. Y no lo decimos nosotros, lo dice cualquiera que las prueba. Dentro de su extensa gama de sabores, os retamos a intentar buscar uno que no os guste. ¿Pensabais que no os gustaba la piña? Pues replantearos la memoria de vuestros paladares ¿Quizás el kiwi? ¿O puede que sea el melón? Si aun por encima sois amantes de las frutas, entonces os animamos a que no sigáis pensando y os lancéis de cabeza a comprar cualquiera de sus productos, porque no os dejarán insatisfechos.
Bien, una vez demostrada la infalibilidad de La Mariquita de Azúcar, tenemos que hablar del mérito gastronómico que contiene cada uno de sus botes de cristal. En ellos Yolanda experimenta con sabores tropicales, alcoholes, especias, frutas de primera calidad, y aporta toda su creatividad y buen gusto. Cada una es más compleja que la anterior, y aunque haya sabores tradicionales que funcionen, esas mermeladas que nunca tocará (como la de tomate) y que son así desde que las hacía su abuela en el fogón de hierro, es en las complicadas combinaciones que se inventa Yolanda donde acaba por conquistar nuestra panza.
Mermelada de peras al vino tinto, mermelada de melocotón, chocolate blanco y armagnac, mermelada de camelias y espumoso de albariño… Saben tan bien como suenan. Alta cocina en una mermelada con la que a parte, se puede aderezar casi cualquier comida que te puedas imaginar.
Recetas con mermelada, rápidas y elevadas
7 ideas : Utiliza la mermelada en tus platos
Hoy venimos a presentaros algunos ejemplos, sencillos, para lucirte en la situación más idónea con el simple gesto de ponerle mermelada de La Mariquita de Azúcar a tu vida.
Navajas con mermelada de tomate y trufa negra

- Rúcula
- Navajas de Ar de Arte
- Mermelada de Tomate de La Mariquita de Azúcar
- Trufa Negra (o salsa de trufa negra preparada)
- AOVE al gusto
Sobre una cama de rúcula se coloca una navaja en conserva de Ar de Arte.
Se adereza con la mermelada de tomate, y se rematada con un poco de trufa negra rallada y AOVE, o en su defecto, salsa de trufa negra ya preparada que incluye aceite.
Brocheta de langostino con mermelada de piña mango y ron
- Mango
- Langostinos
- Mermelada de piña mango y ron de La Mariquita de Azúcar
- Dientes de ajo
- Hinojo
- Chile
- AOVE
Cortamos un mango en dados pequeños (serán la base de la brocheta). En una sartén se calienta aceite, unos dientes de ajo muy picaditos, un poco de hinojo, chile y sal. Se añaden los langostinos a fuego lento unos minutos, pasado este tiempo se dejan reposar 5 minutos en un bol en el que previamente hemos volcado la mermelada. A continuación introducimos la brocheta por el centro del langostino y lo pinchamos sobre un dado de Mango y así las veces que se quiera.

Bombones de queso con mermelada de pimiento y anchoa
- Queso crema (similar al Philadelphia)
- Mermelada de pimiento de piquillo a la brasa de La Mariquita de Azúcar
- Filetes de Anchoa La Brújula
Necesitamos unos moldes para bombones o cestitos y queso crema.
Con 1 cucharilla rellenamos de queso los moldes y dejamos un hueco en el centro de cada bombón, los metemos en el congelador 15 minutos, pasado este tiempo si ya están solidificados, los desmoldamos y procedemos a rellenarlos con la mermelada y en la parte superior colocamos la anchoa en forma de corona.
Tosta de foie con mermelada de camelia y espumoso de albariño
Sobre una tosta untamos el foie y aderezamos con la mermelada. También queda estupendo con todo tipo de patés, o incluso con hígado a la plancha. Brillante y más fácil imposible.
Ventresca de atún con mermelada de tomate

- Pan tostado
- Mermelada de tomate de La Mariquita de Azúcar
- Ventresca de atún claro en aceite de oliva La Brújula
- Esferificaciones de AOVE cento x cento Figueiredo
Otra tosta estupenda. Sobre una rebanada de pan, colocamos la mermelada y coronamos con los lomos de ventresca. Se le puede añadir algún adorno. Nosotros hemos elegido unas esferificaciones de AOVE.
Lomo de cerdo con mermelada de naranja amarga y chocolate
- Lomo de cerdo
- Mermelada de naranja amarga y chocolate de La Mariquita de Azúcar
- Patatas
- Nata líquida para cocinar
- AOVE
- Sal
- Pimienta
Cortamos el lomo en filetes, lo salpimentamos y lo cocinamos lentamente en una sartén con aceite de oliva vuelta y vuelta 15 minutos, untándolo de vez en cuando con la mermelada.
Al estar en el punto deseado lo emplatamos sobre unas pocas (o muchas) patatas panaderas previamente fritas, y encima de la carne ya colocada, terminamos con un toque de nata líquida.
Mousse de mascarpone con mermelada de fresones y hierbabuena a la pimienta rosa

- Queso mascarpone
- Yogur griego natural
- 1 cucharada de azúcar glass
- Mermelada de fresones y hierbabuena a la pimienta rosa de La Mariquita de Azúcar
- Virutas de chocolate negro
Para la mousse utilizaremos el 50% de la cantidad total que queramos elaborar con mascarpone, y el otro 50% de yogurt griego. En un bol vertemos esos dos ingredientes y la cucharada de azúcar glass. Mezclamos con unas varillas muy frías, a buen ritmo hasta conseguir la cremosidad deseada.
En un recipiente ponemos la base de mermelada, terminamos con la mousse y adornamos con unas virutas de chocolate negro por encima.